A los que sufren

Es noche y la lluvia cae por los alrededores tuyos. Se cuenta por detrás que hoy, sos una migaja de lo que eras ayer. Y muchos rien por ello, otros brindan, y vos simplemente lloras.
Recupera tus fuerzas, vola sin sobresalto. El cielo siempre te espera.
Cantale a la vida, brillale al mundo tu luz, no permitas esconder eso tan fenomenal y trascendente que llevas dentro.
Aunque parezca muy antigua mi mirada mundana, confío en que el espíritu sobresaliente, vale más que la belleza real.
Pero si vos sos vos, y acaso yo soy un yo irreprochables.
Por eso, simplemente te envío cosas que ni la mente, ni la capacidad del hombre pueden mirar y observar, para que despiertes.

El maldito amor que tanto miedo da....

No puede morir lo que construye, siempre volverán nuevas almas, que querrán seguir interpretando esa obra. Solo muere lo que destruye.
Me he frustrado de pensar así. El mundo hippie no existe, y vaya, que oscuridad hostil me lo ha puesto a la vista de mi corazón.
Lo que si existe es la felicidad y es algo que ni el más mal bicho nos ha podido tapar.
Te pegan y seguís riendo, no por capricho, sino por amor. El amor es la fuerza más grande que el humano ha sabido desarrollar en toda su existencia.
Nadie puede contra el amor.
Podrán destrozar lo visible, podrán fusilarte, podrán comerte con su insalubridad mental, pero el amor sigue flotando...Y alguien lo capta, y lo transmite con su antena del alma.

Hay mucho amor hoy, por más que muchos lo nieguen, por más que se hable de otra cosa. El amor sigue construyendo.